En la Haciendita esta mañana

Hay todo tipo de pescadores en este ambiente. Desde los apasionados de competencia tanto en agua dulce como salada, hasta el pescador ocasional de fin de semana.

Cada quien pesca como y para lo que más le conviene, no es la idea hablar de algún tipo de pescador en específico, sino más bien de compartirles una de las pescas que más disfruto.

Si bien me gusta mucho acampar con mis amigos y compartir una buena salida de pesca, hacerlo en solitario tiene para mi un significado muy especial. Sea porque de cuando en cuando necesito estar solo, o porque pescando de esta forma vienen a mí recuerdos de mi niñez, estar pescando a solas desde la orilla en una presa en una mañana fresca trae para mi una tranquilidad y una paz que no se encuentra en ningún lado. El concierto de sonidos que el monte me brinda es de lo más relajante, estar ahí en la orilla sintiendo el aire fresco en la cara, escuchando el chapoteo de los patos en el agua, el ganado a lo lejos, viendo las aves en el cielo y escuchando sus cantos me desconecta de la ciudad y de todo el estres que se acumula viviendo y trabajando en ella y limpia mi mente de toda esa basura que no te deja estar en paz.

En serio, si no lo han hecho inténtenlo y espero que sientan esa paz que les comento, van a ver que se van a sentir muy bien.

Les comparto un video de una de esas salidas.